13 de junio de 2018
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La caída en la producción destinada a la exportación tiene en alerta a 500 trabajadores de avícola Avex, adquirida hace dos años por el gigante brasileño.
El conglomerado brasileño BRF estudia la posibilidad de iniciar un proceso preventivo de crisis ante el Ministerio de Trabajo de la Argentina, el cual impactaría la estabilidad de 500 empleados de su filial Avex, en la provincia norteña de Córdoba.
Así lo reportó el diario bonaerense La Nación citando fuentes sindicales. “Hace dos años la compañía de alimentos brasileña BRF anunció inversiones por US$292 millones, pero en los últimos tiempos algunas de sus plantas registran problemas. En enero fue la fábrica de salchicas Quickfood en Baradero y ahora la avícola Avex, en Río Cuarto, donde se agudizó la crisis. Además, desde el Sindicato de la Carne afirman que las instalaciones, que son de última generación, están en venta”.
Siguiendo con lo fue su proceder para el caso de las instalaciones en Baradero (norte de la provincia de Buenos Aires), “BRF pidió para Avex la apertura de un procedimiento preventivo de crisis ante el Ministerio de Trabajo de la Nación para poder efectuar despidos y ofrecer retiros voluntarios”.
Según añadió el mismo periódico, la avícola cordobesa Avex (en la localidad de Río Cuarto) “produce 35,000 pollos diarios con una capacidad instalada para 160,000; alcanzaron a registrar picos de hasta 120,000. Hace dos meses bajó la producción abruptamente e incluso hay días de no faena”.
En Argentina, BRF adquirió marcas tradicionales como Paty, Campo Austral, Sadia, Dánica, Vienissima, Good Mark, Bocatti, Manty y Delicia. En 2016, compró Campo Austral y Alimentos Calchaquí, y ese mismo año anunció que expandiría el negocio avícola en Río Cuarto (Córdoba).
Para dirigentes sindicales consultados por La Nación, la caída en la producción de Avex es consecuencia del cierre de las exportaciones brasileñas a importantes mercados. “La planta cordobesa está armada para exportar y BRF tiene problemas para ingreso a Europa después de la controversia que surgió después de que la policía federal brasileña implicó al grupo en una fase de una investigación policial que afirma que intentó soslayar estándares de seguridad alimentaria”.