Aunque va en aumento el uso de los aditivos, parecen presentarse sentimientos encontrados con respecto a ellos como sustitutos de antibióticos, particularmente en vista de las exigencias del consumidor.
Los participantes de la industria de alimentos balanceados avícolas continúan en la lucha por los altos costos de los granos, al mismo tiempo que siguen trabajando para aumentar las utilidades y cumplir con las exigencias del consumidor en cuanto al “no”: no antibióticos, no hormonas y no subproductos de origen animal en los alimentos balanceados. Los resultados de la Encuesta de Nutrición y Alimentación de WATT de este año reflejan esos desafíos.
Panorama
La encuesta de este año nos muestra algunas buenas noticias para la industria. La cantidad de encuestados que indicaron que anticipaban una rentabilidad negativa o peor en los siguientes 12 meses se encuentra en un nivel bajo por tres años consecutivos.
En la encuesta de 2011, el 36 por ciento de los encuestados previó que empeoraría la rentabilidad debido a las condiciones económicas. En la encuesta de 2012, ese el número cayó a 28.2 por ciento. Este año, sólo el 25.4 por ciento espera que empeoren las utilidades en los siguientes 12 meses.
También este año, el 43 por ciento de los encuestados dijo que espera que aumente la rentabilidad, en comparación con el 47 por ciento de 2012 y el 38 por ciento de 2011.
El optimismo varía de acuerdo con la zona geográfica. Aunque Europa se mantiene pesimista, con un panorama negativo que pasó del 42 por ciento el año pasado a 40 por ciento en la encuesta de este año, Latinoamérica por el otro lado mostró el mayor aumento en optimismo, al pasar del 22 por ciento en 2012, al 47 por ciento este año. Los encuestados asiáticos también fueron optimistas, al presentar un 47 por ciento de mejora en la rentabilidad.
Desafíos
Cuando se le preguntó sobre la importancia de los diversos desafíos a los que se enfrenta el negocio, el 83 por ciento de los encuestados citó el costo y la volatilidad en los precios de los granos como algo muy importante.
De particular interés fueron los desafíos que se citan en segundo, tercero y cuarto lugar, ya que todos se relacionan con los problemas del costo de los granos: calidad de los granos, que incluye a las micotoxinas; costo de la energía, que incluye el transporte y la fabricación; la inocuidad de los alimentos para consumo humano y animal, así como el riesgo de la cadena de suministros.
Panorama de las enzimas de alimentos
Con el aumento el costo los granos, era de esperarse y así se informa, de que hay un aumento general en el uso de las enzimas. No obstante, lo que sorprende es que 29 por ciento de los encuestados indicó que no usaban enzimas o que no utilizaban ninguna de las que se listó en la encuesta.
De las enzimas listadas, el 46.7 por ciento de los encuestados indicó que estaban utilizando xilanasas en la fabricación. Si se añade el 32 por ciento que usa la mezcla de glucanasas y xilanasas, parece que la xilanasa es la enzima que más comúnmente se utiliza en las plantas de alimentos avícolas.
Uso de enzimas, actual y anticipado
Cuando se preguntó más a profundidad cómo el uso de las enzimas había cambiado en los 12 meses anteriores, es interesante ver que 14 por ciento los encuestados indicó que había adoptado o aumentado el uso de NSP cómo soporte terapéutico. Es más, vale la pena mencionar en particular que el 31.9 por ciento indicó que había adoptado o promovido las enzimas por su beneficio en la sustentabilidad ambiental, lo que parece mostrar una preocupación de un mercado cambiante.
Además, el 40 por ciento de los encuestados dijo que en 2013 va a continuar usando el mismo nivel de enzimas, pero casi la misma cantidad, el 36.4 por ciento, indicó que el siguiente año va a aumentar su uso.
Los aditivos como sustituto de antibióticos
En general, parece que la industria de alimentos balanceados avícolas no se pone de acuerdo en cuanto a la eficacia de los aditivos como sustitutos de los antibióticos. No obstante, de los cinco aditivos que se incluyeron en la encuesta, los probióticos y los ácidos orgánicos son los que se percibieron como más efectivos.
Los que calificaron a los ácidos orgánicos, 21 por ciento los clasificó como “fuertes”, mientras que casi la mitad de esa cifra, es decir el 9 por ciento, los clasificó como “débiles” (figura 5). En general, los cinco aditivos cayeron en la clasificación de moderados, sin que ninguno de los aditivos fuera una elección decisiva entre todos los productores.
Una de las sorpresas en los resultados fue la clasificación relativamente baja que recibieron los fitógenos, particularmente comparados con los prebióticos. Esto puede indicarnos que aquí hay una oportunidad de mercadotecnia para la gente que se encuentra en el campo de los fitógenos.
Uso de DDGS
En general, los DDGS van a seguir formando parte de los alimentos avícolas en la mayoría de las compañías, en las que el 60.3 por ciento informó que el nivel de uso va a permanecer igual o aumentará un poco o significativamente en los siguientes 12 meses. Solamente el 40 por ciento informó que no a usar este ingrediente.
Esta cifra es similar a la que encontramos en nuestra encuesta de 2011 y 2012. En 2011, el 57.5 por ciento de los encuestados indicó que el siguiente año usarían DDGS. En 2012, el uso previsto fue del 61.3 por ciento. Parece ser que se ha estabilizado el uso general de los DDGS en la industria de alimentos balanceados avícolas.
En Estados Unidos, el porcentaje de los encuestados que dijo que no usó DDGS en el alimento balanceado bajó del 40 por ciento en 2012, a 33 por ciento en la encuesta de este año. Y a la inversa en Europa, en donde el 48 por ciento de los encuestados del año pasado dijo que no usaba DDGS, subió al 52 por ciento.
Antibióticos, otras inclusiones
En la encuesta de 2012 se notó una tendencia de una reducción general en el uso de antibióticos y medicamentos anticoccidianos y esta tendencia parece seguir avanzando. En la encuesta de este año, el 26 por ciento de los encuestados hizo notar que había reducido el uso de antibióticos subterapéuticos y 24 por ciento indicó que había reducido el uso de antibióticos terapéuticos.
También es de notar los aditivos informados por los encuestados que habían aumentado en los alimentos avícolas. El 42 por ciento de los encuestados dijo que usa organismos prebióticos. El 39 por ciento de los encuestados dijo que aumentó el uso de secuestrantes o inhibidores de micotoxinas y el 31 por ciento dijo que había aumentado el uso de productos de paredes celulares de levaduras. En una pregunta por separado, el 52 por ciento dijo que incluían prebióticos en la formulación de alimentos y el 62 por ciento que incluía probióticos.
Especificaciones de la etiqueta
Muy probablemente, debido a las crecientes exigencias del consumidor, las especificaciones de las etiquetas claramente se han convertido en un aspecto importante de la comercialización de alimentos balanceados para productos avícolas, en el que hay un número sustancial de encuestados que indica que ahora incluyen algún tipo de declaración en la etiqueta; la más común es “sin hormonas” (figura 8). Otras de las especificaciones que se ofrece son (en orden): sin antibióticos/medicamentos, sin productos de origen animal o “dieta completamente vegetariana”, completamente orgánico y natural, y dieta exclusivamente de maíz. Ya que en esta área aumentan las exigencias del consumidor, no debe de sorprendernos que esta cifra aumente en 2014.