17 de mayo de 2018
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Junto con Joesley Batista, también fueron acusados el exfiscal federal Angelo Goulart y Francisco Assis, exejecutivo de J&F Investimentos, sociedad tenedora de JBS.
Fiscales federales de Brasil acusaron al expresidente de JBS Joesley Batista de cargos de corrupción, lavado de dinero y obstrucción de la justicia, según un reporte.
También fueron acusados Francisco Assis, exejecutivo del grupo J&F Investimentos —sociedad tenedora de JBS—, y Angelo Goulart, un exfiscal federal. Batista es el dueño de J&F Investimentos.
Goulart es acusado de filtrar información interna de la oficina de fiscalía a Batista y de ayudar a facilitar sus negociaciones para un acuerdo de culpabilidad, informó Reuters.
Según el medio brasileño Globo, también fueron acusados el abogado Willer Tomaz de Souza —cargos de corrupción, violación de secreto funcional, obstrucción de investigaciones y lavado de dinero—, el publicista André Gustavo Viera da Silva y el presidente de la Ordem dos Advogados Seccional do Distrito Federal (OAB-DF), Juliano Costa Couto. Estos últimos fueron acusados de corrupción y lavado de dinero, según el reporte.
Bajo los términos del acuerdo de declaración de culpabilidad firmado hace un año, Batista y Assis confesaron ciertos crímenes de corrupción y fueron eximidos del enjuiciamiento por su cooperación.
Sin embargo, el juez de la Corte Suprema Edson Fachin está considerando anular el acuerdo de culpabilidad, tras una solicitud del exfiscal general Rodrigo Janot, realizada en septiembre del año pasado. Janot hizo la solicitud durante sus últimos días en el cargo y declaró que el acuerdo con fiscalía debía anularse porque ciertos hechos habían sido ocultados a las autoridades.
Los cargos contra Batista se producen dos meses después de su liberación de la cárcel, donde se encontraba desde septiembre de 2017.
Batista y su hermano, Wesley Batista, habían sido encarcelados bajo sospecha de abuso de información privilegiada. Ambos supuestamente usaron información interna para evitar pérdidas financieras luego de obtenerla durante el proceso de negociación por el escándalo en el que admitieron haber sobornado a políticos brasileños.
Wesley Batista se desempeñó como director ejecutivo de JBS, una empresa cárnica y avícola con sede en Brasil, hasta su arresto en septiembre. Posteriormente, fue reemplazado por su padre, José Batista Sobrinho, también fundador de la empresa que lleva su nombre.
El mandato de Joesley como presidente de JBS terminó hace aproximadamente un año. Fue reemplazado inicialmente por Tarek Farahat. Farahat sirvió en esa capacidad hasta octubre de 2017, cuando la junta de JBS nombró a Jeremiah O'Callaghan como su nuevo presidente.
O'Callaghan había pasado los últimos 10 años como oficial de relaciones con inversores de JBS.