La suspensión de las exportaciones de ciertas plantas pone en riesgo el crecimiento de Brasil en el renglón de exportación de pollo.
Las ventas de carne de pollo (tanto en productos frescos como procesados) de Brasil totalizaron las 1.017 millones de toneladas, un 5.6 por ciento menos que las 1.078 millones de toneladas registradas en el primer trimestre del año pasado, informó la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA).
En ingresos, las ventas del año llegaron a US$1,605 millones, cifra 11.9 por ciento inferior en comparación con los US$1,822 millones de los tres primeros meses del año pasado.
Al considerar solo el mes de marzo, el sector exportó 376,600 toneladas, desempeño 2.2 por ciento menor que las 385,100 toneladas registradas en el mismo período de 2017. Los ingresos por los embarques llegaron a US$589.9 millones, cifra 10 por ciento menor que los US$655 millones del tercer mes del año pasado, según indicó la ABPA en un comunicado.
“El año era prometedor para el sector, pero la suma de los costos de producción en aumento y las suspensiones de plantas del mismo Brasil a la Unión Europea impactaron negativamente el saldo del trimestre. En marzo, las ventas de carnes saladas, principales productos importados por los europeos, registraron pérdidas cercanas al 50 por ciento en volumen”, explicó Francisco Turra, presidente ejecutivo de la ABPA.
De acuerdo con el presidente de la ABPA, el sector tiene grandes expectativas con la reanudación de las exportaciones de plantas suspendidas de empresas del sector por el Ministerio de Agricultura brasileño para hacer embarques a la Unión Europea, lo que debería reparar el impacto causado por la fuerte retracción en las exportaciones hacia el bloque.
“La situación se refiere en su totalidad a criterios de clasificación de productos, no de riesgos al consumidor. Son empleos en riesgo, en un momento fundamental para la recuperación económica del país. Abrir un mercado se lleva años de inversiones y es una gran lucha. Por este motivo, confiamos en que el Ministerio de Agricultura agilizará este proceso de negociación con Europa de forma prioritaria. De la misma forma, creemos que se debe recapacitar sobre las estrategias de explicaciones y posibles correcciones, dando valor y crédito al sector agro-industrial brasileño. Se deben combatir las ilegalidades, pero podemos pagar caro las decisiones drásticas”, señaló Turra.