Este año el gobierno ruso ha disminuido la cuota de importación a 350,000 toneladas. Los pronósticos de Rusia son que desde hoy al 2015, la producción se incrementaría en 60%.
Rusia persiste en ser autosuficiente en su capacidad alimentaria. Por esto, desde este año, ha logrado disminuir aproximadamente en el doble la cuota de importación de carne de aves, que actualmente se sitúa en 350,000 toneladas, una cifra absolutamente contrastante con la de años atrás, cuando Rusia importaba de EUA 1.5 millones de toneladas de carne de pollo.
El gobierno ruso ha fijado cuotas para apoyar a los productores nacionales, entrando en vigor paulatinamente desde el año 2003. Durante, los últimos cinco años los volúmenes de la producción rusa se han duplicado. Es así como actualmente los proveedores rusos cubren 85% de las demandas de la población, valoradas en 3.5 millones de toneladas al año. A los avicultores les favorece los altos ritmos de inflación, ya que los consumidores tienden a declinar ante la carne de cerdo o de vaca, consumiendo mayor carne de pollo, la más barata. Hasta el año 2013 se pronostica en Rusia el aumento de la producción de la carne de ave en 60%.
Una ejemplificación de esto es que los avicultores de la región de Chelíabinsk en los últimos años han modernizado la producción y han propuesto proyectos nuevos. Ellos han realizado cálculos razonables: es más fácil empezar desde cero que corregir los errores ajenos. En los últimos cinco años, han sido invertidos 398,215,000 euros en la modernización de la producción de avicultura regional. Gracias a esto, en la región de Chelíabinsk se han puesto en marcha nueve aéreas nuevas para la crianza de pollos de engorde.