Estos dos países centroamericanos actualizaron su protocolo de vigilancia epidemiológica de enfermedades aviares para mantener el intercambio comercial.
Autoridades sanitarias de Costa Rica y Nicaragua firmaron la actualización del protocolo para fortalecer la vigilancia epidemiológica de enfermedades aviares, informó el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) costarricense.
La firma del acuerdo se dio entre el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) —adscrito al MAG— y el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria de Nicaragua (IPSA).
“El objetivo del protocolo es facilitar, normar, regular y asegurar el intercambio comercial de pollitos, pollitas de un día de nacidos, huevo fértil, productos y subproductos avícolas de consumo humano entre ambos países”, informó el MAG en un comunicado publicado en su sitio web.
Asimismo, se indicó que las granjas que provean las mercancías deberán estar libres de Newcastle velogénico, influenza aviar y otras enfermedades “de interés sanitario”.
“Además de las garantías sanitarias que el protocolo brinda, el instrumento da seguridad y transparencia en los requerimientos de los países para el comercio internacional”, señaló Federico Chaverri, director general del Senasa.
En lo que va de año, Costa Rica ha exportado a Nicaragua 3.6 millones de docenas de huevo fértil, además de sobre 6 millones de pollitos y pollitas, según datos del MAG.
De otro lado, en 2017, Costa Rica reportó una producción de 74 millones de pollos y 3.4 millones de ponedoras, mientras que Nicaragua tuvo una producción de 63.8 millones de pollos y 2.2 millones de ponedoras, de acuerdo con la base de datos de empresas avícolas líderes de WATTAgNet.