Benjamín Ruiz: Pareciera que la consigna es que hay que ponerle más piedras al zapato de la industria avícola en Latinoamérica. Hay que hacer las cosas más complicadas. Ahora uno de los problemas que surge de forma abrumadora es la logística del transporte en México.
La avicultura avanza, pero no debemos olvidarnos de los puntos básicos, como el agua, que sigue dejándose a un lado en muchos aspectos, como su temperatura.
Otro récord en las cosechas de los mayores productores regionales, Brasil y Argentina, permite que sigan bajos los precios del principal insumo avícola. Sin embargo, poco de ese excedente llega a la avicultura latinoamericana.
Avícola europea asegura que produce huevos compensando a cero la emisión de este gas de efecto invernadero, y por eso cobra mucho más por su producto. Otros trabajan en esa misma vía en nuestros predios sin subir precios, ¿cuestión de mercados?
Luego de llevar su propuesta a México, Brasil y Colombia, los promotores de los huevos libres de jaula incursionan en Argentina, donde el gremio avícola los recibió con los recelos habituales. ¿Qué rumbo marca esta tendencia?