En el Reino Unido, un tribunal determinó que el veganismo es “una creencia filosófica”. ¿Qué podría esto representar para la industria cárnica?
En Inglaterra, a principios de enero un tribunal laboral dictaminó que el veganismo es “una creencia filosófica o modo de vida”. Como tal, debe estar protegida por la ley de Igualdad del Reino Unido. Esto fue el resultado de un despido del trabajo considerado discriminatorio, que el acusado atribuye a sus firmes convicciones veganas.
Como fue en un tribunal laboral, el artículo en el que leí esta noticia habla de las implicaciones que pueda haber: ¿y si un cajero de un supermercado se niega a cobrar productos cárnicos? Me voló la imaginación y pensé: ¿y si un trabajador de una planta de procesamiento se niega cortarle el pescuezo a un pollo? Lo bueno es que ya hay máquinas que hacen esto, aunque se pueden negar a encender el interruptor.
Los defensores de este caso hablan de una “cultura de respeto a las convicciones de los empleados al desempeñar su trabajo”. Y yo me pregunto, si no quieren pasar el infortunio que atenta contra sus convicciones, ¿por qué eligieron trabajar ahí? Yo, por ejemplo, jamás sería mecánico de automóviles porque no sé nada de mecánica y tampoco me gusta. Es mi estilo de vida. Además de que ¡necesitamos de los mecánicos! Y en tantas otras cosas en las que no estoy de acuerdo o que no me gustan. ¿Y las convicciones, o el hambre, de quien quiere o compra carne?
La producción animal no puede competir con una “creencia filosófica”. Ni viceversa. A ver si me explico. Creo en la libertad de creencias, pero lo que sí me parece una invasión a la libertad de uno es cuando el fundamentalismo de otros se interpone en el camino. Y he aquí el asunto: el hacer proselitismo y pedir a toda costa que no se produzca ni consuma carne, ni huevos, ni cuero, ni leche, ni miel.
Derechos de los animales no humanos. Me pregunto, ¿dónde quedan los derechos de los “animales” humanos? Y también me cuestiono, ¿dónde queda el deber y la responsabilidad de producir alimentos? Quienes se llenan la boca de tolerancia y simpatía, terminan por ser intolerantes y hacer caso omiso de lo que los demás quieren.
¿Ustedes qué piensan?