18 de marzo de 2020
Tapete sanitario en granja avícola (Benjamín Ruiz)
¿Le suena a algo de lo que estamos pasando con el COVID-19 con respecto a la avicultura?
Desde mi trinchera, mi casa, veo pasar muy poca gente por la calle. Ya hasta se sienten lejos esas imágenes de la calle llena de actividad en Madrid. Igual fue en México en 2009 con la H1N1, aunque la memoria de la gente lo haya ya olvidado. Muchos me miran incrédulos cuando les digo que yo ya he pasado por estas.
Pero hablemos de avicultura. ¿A qué se parece todo este asunto del COVID-19 de encerrarse en casa, de solo salir para lo muy necesario, de mantener distancias, de desinfectar, de limpiar? No puedo más que remitirme a la sobada bioseguridad.
Así como en estos momentos el mundo aprende a evitar contagiarse del coronavirus, así debemos de recordarnos que en la avicultura debe ser igual. La limpieza personal y de las instalaciones es primordial, no transportar material contaminado, como la gallinaza, por ejemplo, tener bien cerradas las instalaciones e impermeables a visitantes y personas ajenas, y una larga lista. Se parece, ¿no?
Otro aspecto importante es el de las aglomeraciones, pues por el momento no podemos asistir a fiestas, congresos o conciertos. Alguien podría argumentar que las aves están aglomeradas en las granjas. Pero es en este punto donde debe hacerse más énfasis en que por eso deben asilarse las granjas, para evitar contagios. Los sistemas de producción en libertad, por ejemplo, pueden representar un riesgo.
Esta es una fuerte lección porque nos está pegando a todos por todos lados, desde la salud pública hasta la economía. Pero ya hemos recibido estos embates en la producción avícola con anterioridad, así que esto no es nada nuevo. Ahora, debemos establecer protocolos para los trabajadores, tanto en granjas como en plantas de procesamiento, que indudablemente reforzarán la bioseguridad avícola.
Y una cosita más. Debe caber en nosotros la prudencia y la responsabilidad. El estado y las autoridades están para reglamentar, pero ya sabemos que no siempre responden en consecuencia. Así que pongamos de nuestro lado y trabajemos juntos, en concordancia.
¿Ustedes qué piensan?