Sube el consumo per cápita y varios países experimentan un empuje en las exportaciones
Durante 2009 estuvo en aumento la curva de crecimiento de la industria porcina latinoamericana.
El consumo per cápita de carne de cerdo está consistentemente creciendo, aunque todavía está lejos de las cifras que los países de la Unión Europea están experimentando. Pero, debido a que los principales mercados de Latinoamérica están impulsando la producción porcina y las exportaciones, surgen expectativas positivas para el futuro de este sector.
Aumenta el consumo en Argentina
Este es el caso de Argentina, en el que los productores sacrificaron más de 1.5 millones de cabezas en el primer semestre de 2009, un 15% más que en el mismo período del año anterior, según la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA). La industria ha estado mostrando resultados positivos desde 2004, dice Juan Uccelli, presidente de la Asociación Argentina de Productores de Porcinos (AAPP).
Figura 1: Consumo per cápita latinoamericano
“En su historia, la industria porcina argentina nunca ha sostenido esta tendencia por tanto tiempo”, comentó Uccelli durante la exposición Fericerdo 2009.
Las estadísticas oficiales de la ONCCA indican que la demanda local se ha incrementado en 9% en volumen, mientras que las exportaciones han crecido 84% en volumen y 78% en monto en el primer semestre de 2009, en comparación con el mismo período en 2008. Para garantizar que el sector continúe con resultados positivos, la Secretaría de Comercio y Relaciones Económicas Internacionales de Argentina está apoyando a los pequeños porcicultores afectados por la intensa sequía.
La medida se estableció mediante la resolución 550/09 publicada en el Boletín Oficial. La sequía ha hecho disminuir seriamente la cosecha de trigo, lo cual podría tener impacto sobre la producción porcina.
Producción porcina en Chile y Brasil
Chile es otro mercado latinoamericano en el que la demanda interna de productos porcinos ha estado incrementándose sin detenerse durante varios años. De hecho, a finales de 2008, por primera vez en la historia chilena, la carne de cerdo estuvo en segundo lugar, después de la carne de aves, en demanda interna, sobrepasando a la carne de res.
Según la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias de Chile, los chilenos consumieron 25 kg de carne de cerdo por persona durante 2008, mientras que la demanda de carne de res fue de 22 kg por habitante al año en ese mismo período.
Figura 2: Producción de carne de cerdo latinoamericana 2008
Brasil se merece un capítulo en sí mismo. Es el mayor productor de Latinoamérica, que representa más del 61% de la producción porcina del continente suramericano. En este país, el consumo per cápita de carne de cerdo pasó de 8 kg por persona al año en 1993 a 13 kg en el primer semestre de 2008, según la Asociación Brasileña de Reproductores de Cerdo (ABECS).
Aunque Brasil es el cuarto productor y exportador porcino más grande del mundo, el creciente consumo per cápita sigue estando mucho más abajo que el de países europeos como España, con 66 kg por persona al año, e incluso más bajo que en el mercado chileno.
Los brasileños relacionan a la carne de cerdo con la obesidad y malos controles de calidad y sanitarios, según un estudio de la ABECS. Esta es la razón por la cual la asociación lanzó una campaña en 2007 titulada “Una nueva perspectiva de la carne de cerdo” con el objetivo de aumentar el consumo interno en dos kg per cápita al año para 2010.
Exportaciones brasileñas
Por otro lado, de enero a julio de 2009, Brasil exportó más de 342,000 toneladas de carne porcina, que produjeron $683 millones en ingresos, según la Asociación Brasileña de la Industria Productora y Exportadora de Carne de Cerdo (Abipecs). Esto implica un crecimiento del 4.83% en volumen en relación al mismo período en 2008. Rusia, Hong Kong, Ucrania, Angola y Singapur fueron los principales destinos.
Esta asociación tiene la confianza de que la industria va a llegar a exportaciones de 600,000 toneladas en 2009, superando las 529,000 toneladas de 2008.
Con el objetivo de incluirse en esta tendencia regional, recientemente Uruguay lanzó una campaña para elevar el consumo de carne de cerdo de los actuales 10.2 kg per cápita al año. Esta iniciativa surgió de la Unión de Vendedores de Carne y de la Asociación Nacional de Carniceros. La campaña se basa en identificar con un logo especial a los minoristas que venden un kg de carne de cerdo deshuesada a un precio muy razonable.
De regreso a la normalidad
El virus H1N1 se propagó rápidamente por todo el mundo y afectó a todo el sector porcino.
“Desafortunadamente para la industria, la “influenza porcina” se confundió con el brote actual de influenza en el ser humano, aunque la situación está más relacionada con asuntos de salud pública y no con los cerdos, carne de cerdo o sus subproductos”, según la Organización Iberoamericana de Porcicultura.
México, particularmente, recibió un fuerte golpe por el virus, dado que fue en ese país que se dio el primer brote en el ser humano. Sin embargo, México fue recientemente declarado “libre de influenza porcina ” por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación.
De acuerdo con este organismo, el sector porcino de México está compuesto por 15.2 millones de cabezas, que produce aproximadamente 1.4 millones de toneladas de carne de cerdo al año.
Las exportaciones de carne de cerdo producen más de $300 millones de dólares y sirve a mercados como Japón, Corea y Estados Unidos. – Pig International